Comprar casas en privadas residenciales en Xalapa, Veracruz y Tulum es una excelente decisión porque ofrecen seguridad, plusvalía y calidad de vida.
Estas comunidades se han consolidado como la opción favorita para quienes buscan proteger su patrimonio y vivir en un entorno tranquilo.
En el mercado inmobiliario, el contexto lo es todo, y pocas ubicaciones generan tanto valor como una casa dentro de una comunidad cerrada o privada con vigilancia.
Las casas con acceso controlado son más seguras porque cuentan con vigilancia 24/7 y sistemas que reducen la incidencia delictiva, ofreciendo tranquilidad a las familias.
De acuerdo con datos de Infonavit y la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), la seguridad es el factor número uno para más del 80 % de las familias mexicanas al elegir vivienda.
En Xalapa, Veracruz y Tulum, las privadas con estos esquemas crean un entorno de confianza donde la vida cotidiana se disfruta con calma.
💡 Dato clave:
Las propiedades en privadas se venden o rentan hasta 30 % más rápido que en colonias abiertas (Lamudi, 2024).
La plusvalía inmobiliaria en privadas residenciales es superior a la de las zonas abiertas, ya que estas propiedades incrementan su valor de la siguiente manera:
| Tipo de propiedad | Plusvalía anual promedio |
| Privada residencial con acceso controlado. | 8% - 12% |
| Zona residencial abierta | 4% |
La razón es clara: alta demanda, oferta limitada y seguridad garantizada, factores que mantienen y hacen crecer el valor de tu patrimonio. Invertir en una comunidad privada es proteger tu patrimonio y hacerlo crecer con el tiempo.
Vivir en una privada residencial significa tener calles seguras, áreas comunes bien mantenidas y un entorno de vecinos confiables donde se fomenta la comunidad.
Más allá de los números, está la tranquilidad de pertenecer. Poder dejar que los niños jueguen seguros en la calle, conocer a los vecinos, vivir en un entorno controlado… todo eso crea una sensación de pertenencia invaluable.
En Xalapa, Veracruz y Tulum, quienes habitan en desarrollos con acceso controlado disfrutan de un ambiente familiar que mejora la calidad de vida.
Esta experiencia explica por qué la demanda de casas en privadas sigue creciendo.
Poner en venta o en renta una propiedad en un fraccionamiento privado no es solo una ventaja: es una estrategia inteligente.
En Jemmoma sabemos que el valor de una casa no está solo en sus muros, sino en el entorno que la rodea.
En ciudades como Xalapa, Veracruz y Tulum, las comunidades privadas siguen marcando la pauta del mercado inmobiliario.